Dialektische und begründete Grundlage, Entstehung der Arbeit
Gran parte del terreno reconocible, visible y hoy en día transitable fue en algún tiempo remoto extensión o parte integrante de uno de esos grandes mares que en su momento abarcaron y cubrieron casi por completo nuestro planeta. Vastas superficies de agua contenida perteneciente a océanos que retrocedieron significativamente o a pequeños mares que simplemente desaparecieron dejando en su retirada rastro y señales evidentes de antecesores que evolucionaron y desarrollaron su vida en dicho hábitat y cuya vida comenzamos a entender, descifrar e interpretar poco a poco, lo que nos ha permitido recrear con ello un mapa cada vez más detallado de la historia de nuestro planeta, de su origen y de nuestra génesis. Fondos marinos, lodazales, ciénagas, pantanos, manglares y fangosas charcas en las cuales han quedado estampadas las huellas de antiguos habitantes que nunca por suerte llegamos a conocer y que posiblemente algún día nuestros avances en ingeniería genética, pero que ¡ojala...! no seamos lo ingenuamente ignorantes como para cometer el grave error de caer en dicha tentación, nos permitan revivir. Dar vida a criaturas que pervivieron en circunstancias en las cuales la vida era totalmente salvaje, en la que no imperaba ley ni orden alguna y en la que tan simplemente el tamaño, la fuerza bruta y el instinto eran quienes dominaban y se imponían, sería posiblemente motivo suficiente que condujera a nuestra desaparición. Quizás el reto mismo de lograrlo, tal vez en parte nuestra curiosidad o el mero hecho de sobresalir y destacar nos lleven hasta ese extremo, pero el lograrlo jamás sería un beneficio mayor que el perjuicio que nos pudiere causar. Lo más probable es que no sólo con la recreación de esas criaturas se diese vida a un mundo de reptiles, aves o mamíferos agresivos ya extintos, sino que también proliferarían congéneres microscópicos que cohabitaron en alianza dentro de su organismo, así como bacterias, gérmenes y resto de elementos microscópicos que supondrían una amenaza mayor aún si cabe.
"La superficie del planeta cambia a medida que la climatología cambia y este no es un hecho achacable únicamente a la actuación del ser humano sino a la iteración con nuestra estrella y su desarrollo. Una atmósfera con la capacidad de retener un mayor o menor grado de humedad influye directamente en las precipitaciones y con ello en la biodiversidad de las especies."
"”Ciencia y cosmos” es parte del título de una serie secuencial de obras que hacen referencia a aquellos logros y descubrimientos científicos o tecnológicos que le han permitido al ser humano obtener un salto cualitativo y cuantitativo en su desarrollo.”