Dialektische und begründete Grundlage, Entstehung der Arbeit
La profesionalidad y la capacitación son de esos valores que tienden visiblemente a depreciarse o en su caso a menospreciarse de forma alarmante. El periodismo es otra de esas ramas en las que se observa cómo de manera encubierta se sustituyen o se relegan a verdaderos expertos en la información de cuantos espacios públicos y privados especializados en la difusión y trasmisión de la actualidad se programan, condenándoles al olvido y al fracaso. Estos se sienten una y otra vez objeto manifiesto de la imposición o de la coacción arriesgándose en caso de no acatar las directrices impuestas a ser apartados de su profesión por el único y mero hecho de prestarse a ser imparciales en un honesto intento de llevar a cabo su trabajo haciendo fiel reflejo de la realidad y de los hechos. Esto no es más que una merma del estado democrático y de la libertad de pensamiento, una manipulación dictatorial con intención adoctrinadora. El gobierno imperante o en su caso los partidos impositores que lo manejan, hacen cábalas para introducir a sus influyentes delegados dentro de los consejos de administración o mejor llamados grupos de manipulación, de los medios públicos y privados para desvirtuar y manejar la coyuntura informativa a placer, siempre a costa de los presupuestos del estado. Las estadísticas se manipulan, los puntos de vista cambian de perspectiva para que se presten favorecedores y sin ninguna duda se regula la imagen a mostrar del líder gubernamental para que aparente siempre gratitud, optimismo, positivismo y tranquilidad dentro de la irrefutable óptima gobernabilidad que supuestamente lleva a cabo. En las retrasmisiones audiovisuales de equívoco y falso contenido informativo, expuestas de manera general pretenciosamente distendidas y joviales, hacen gala de presencia personajes que nada o poco tienen que ver con el periodismo, instructores y conductores únicos y en cualquier caso presentadores que deciden en su espacio a quien o a quien no hacer partícipes en la convocatoria de debates, cuantos invitados superan el filtro de comulgar con su pensamiento o mejor dicho con sus ideas, eso sí siempre bajo usufructo de disponer de un buen sueldo. A fin y al cabo éste es el protagonista estrella e invitado de honor principal del programa, patrón que se permite la potestad de señalar o expulsar de su silla a cuantos aduladores no besen sus pies, quien en última instancia impone y hace prevalecer su opinión como justo juicio fehaciente de la verdad única posible, algo tremendamente patético que nunca sería el recurso de un verdadero experto y profesional. Pseudo profesionales si lo fueron, de otras especialidades a las que en primera instancia recurrieron y que en su equívoco o en la mejor oportunidad que la vida les presentó, no dudaron en dar un cambio de giro a su vida para engancharse al carro del dólar y de la influencia mediática.
"Cuando la mayor parte de nuestra información audiovisual llegaba por medio del cable, se miraba con lupa a quienes redactaban y retrasmitían la información. Hoy en día son múltiples los medios para estar informado y por supuesto gracias a ello existen otras vías para conocer cierta verdad, aún con el riesgo de caer igualmente en la manipulación, pero al menos existen diversas formas de equiparar ideas y de extraer conclusiones personales"
“”Fotosíntesis” otorga título a un conjunto de obras cuya ejecución se resuelve de manera mucho más minimalista y simple. Su nombre tiene una doble connotación que hace referencia por un lado a su origen plástico, partiendo siempre de una funcionalidad más estética y práctica acorde al gusto imperante de los tiempos y por otra asociada al nombre científico que justifica el proceso por el cual lo inorgánico se convierte en orgánico mediante el uso de la luz”