En mayor o menor medida se mantiene un elevado nivel de alerta, un pormenorizado estudio y cierto control sobre aquellos núcleos con posible actividad volcánica que pudieran amenazar con una incipiente e inusual actividad. Se suelen observan principalmente los movimientos terrestres que se suceden alrededor de los conos y laderas del mismo, la temperatura y las emanaciones tóxicas, así como oscilaciones que aporten pistas para detectar con anticipación una posible explosión, pues hoy por hoy existen aún numerosas zonas con población cerca de alguna elevación volcánica, a pesar de que los lugares por excelencia con mayor riesgo volcánico suelen estar ubicados en islas que aún están en formación. La frecuente y recurrente actividad sísmica que ha ido sucediendo en concreto sobre la isla de La Palma -España- a lo largo de los últimos meses, acabó culminando en septiembre con la erupción del volcán en las inmediaciones de la denominada "Cumbre Vieja" en la que se registraron más de seis mil seiscientos pequeños seísmos que terminaron provocando una erupción volcánica en la zona sur de la isla, de la cual fue necesario evacuar a unas cinco mil personas en los municipios de Fuencaliente, Mazo, Tazacorte y Los Llanos de Aridane. Se abrieron dos fisuras en el suelo separadas entre sí por unos doscientos metros, de las que emergió la lava a través de ocho bocas diferentes. Se trató de un enjambre sísmico, un fenómeno que tiene lugar cuando una gran cantidad de terremotos comparten espacio y tiempo y que no es inusual en las islas que cuentan con actividad volcánica. La deformación en la superficie como consecuencia de la actividad sísmica en la isla ha propiciado que La Palma se haya abombado entre quince y diecinueve centímetros, según el instituto geográfico nacional. Las estimaciones sugieren que el volcán contiene en su interior entre diecisiete y veinte millones de metros cúbicos de magma. En la última y anterior erupción ocurrida en la isla de La Palma, exactamente en la zona de Teneguía en el año 1971, el volcán arrojó un total de cuarenta y tres millones de metros cúbicos de lava durante veinticuatro días. La erupción volcánica no es en sí solo una amenaza por los ríos de lava que desprende y que por supuesto arrasan con todo a su paso; otro de los desafíos y preocupaciones que conlleva radica en controlar los posibles incendios que puedan surgir como consecuencia del avance de esta lava a través de la isla y las emisiones tóxicas de productos que se desprenden, nada óptimos para la respiración humana. Una primera estimación del Instituto Volcanológico sugiere que entre seis mil y nueve mil toneladas de dióxido de azufre serán emitidas diariamente a la atmósfera como consecuencia de la erupción. La lava discurre en su avance a lo largo de la isla de camino al mar a una velocidad de setecientos metros por hora y a temperatura de la lava asciende hasta los mil setenta y cinco grados.

Fuente: https://www.nationalgeographic.com.es/naturaleza/erupcion-volcanica-palma-10-datos_17344

"La erupción de "Cumbre Vieja" ha supuesto para los habitantes de la región un borrón y cuenta nueva en sus vidas. Han perdido no sólo su hogar y su sustento. Ahora toca comenzar de cero nuevamente, pues todo cuanto se ha hecho y se ha trabajado durante tantos años ha servido de poco, si no se dispone de ahorros y respaldo. Ese es parte del riesgo y sacrificio de vivir cerca de un paraíso en formación."

"”Ciencia y cosmos” es parte del título de una serie secuencial de obras que hacen referencia a aquellos logros y descubrimientos científicos o tecnológicos que le han permitido al ser humano obtener un salto cualitativo y cuantitativo en su desarrollo.”