Dialectic and reasoned foundation, origin of the work
Nada aparentemente parte de la nada, el cero absoluto no es posible y esto que en sí parece una contradicción es la base de todo principio analizado. Toda concepción tiene un origen acreditado. La creatividad siempre parte de la inspiración y ésta se abastece del recuerdo, retentiva de elementos u formas memorizadas ya antes conocidas. No existe artista capaz de crear a partir de la nada, ni pensador que no pudiere justificar su planteamiento en la observación de un efecto o suceso en momento alguno acaecido con anterioridad. Para dar origen a una idea ha de haber una base de conocimiento y ello en sí condiciona y justifica la creatividad. El mérito de la invención y de la originalidad consiste en ser capaz de formular e idear algo con la innovación suficiente para tener la cualidad de aparentar distinto y sorpresivo. Todo ello en ningún momento desmerece la creatividad, más al contrario, le otorga la virtud que supone la dificultad de hacer conocedor al resto de lo invisible. Todo esto justifica el temido momento en cual uno ha de enfrentarse al papel u lienzo en blanco.
"Obra en débito. Mis mayores respetos al espíritu creativo del ser humano."
"La creatividad en origen se revela símil a una partitura. En un comienzo impoluta, tan sólo delineada por las equidistantes pautas del un pentagrama que va adquiriendo movimiento a medida que las notas desfilan entre compases, aportándole ritmo y musicalidad."
“Los valores bajo los que se sustenta nuestra sociedad nacen del materialismo puro. El pragmatismo y los intereses materiales son la única y fundamental ambición en torno a lo cual todo gira. Las imperfecciones en el comportamiento y las pautas del ser humano son la consecuencia extrema de asociar hedonismo y materialismo y esto es lo que analiza ésta serie de obras.”